Por primera vez en la historia se celebra hoy el Día Internacional de Cero Desechos. En este día se trata de fomentar la concienciación sobre la importancia de los cero desechos y de las prácticas de consumo y producción responsables, así como de la gestión de los desechos urbanos contribuyendo al logro de un desarrollo sostenible.
Con la "regla de las 5R" (rechazar, reducir, reutilizar, reciclar, compostar) se puede producir gradualmente menos residuos. Aquí te explicamos como aplicar esta regla y que no solo un día como hoy en el que se intenta concientizar sobre los desechos, se convierta en tu rutina diaria.
Cuando se trata de desperdicio y desperdicio de recursos, a menudo se habla de "desperdicio cero". El movimiento de cero residuos está comprometido con lo que parece radical o incluso imposible para muchos: el boicot a la basura.
La pionera de este movimiento es la bloguera francesa de cero residuos Béa Johnson, que ha estado viviendo libre de basura desde 2008, casi. Un poco de basura finalmente se junta, pero con Béa y su familia, la basura que se acumula en un año se puede empacar en un frasco de un litro.
En su estilo de vida de cero residuos, Beá sigue las llamadas "5 R" (que a menudo solo se conocen como "Reducir, Reutilizar, Reciclar") para vivir lo más libre de plástico y residuos posible:
Rehusar
Reducir
Reutilizar
Reciclar
Reincorporar
Si sigues estos principios en este orden, es decir, "evitar" como primera opción y "compostar" o reincorporar a la tierra, como última, también en tu manejo de recursos, estarás mucho más cerca de una vida libre de residuos. Te explicamos de qué se tratan las cinco "R" y cómo puedes implementarlas en tu vida cotidiana.
Rechazar
En la vida cotidiana, asegúrate de rechazar lo siguiente:
Folleto (tome una foto de teléfono celular en su lugar), revistas gratuitas (publicitarias), bolsas de plástico en supermercados u otras tiendas, cupones, notas de fidelidad, etc.
Ya se ha dado un pequeño paso hacia la prevención de residuos y muchos países prohibieron el uso de envases de plástico de un solo uso pero aun queda camino por recorrer.
Reducir
¿Realmente tiene que ser la quinta camiseta blanca? ¿No es suficiente lo que ya tengo? ¿Realmente necesito el último teléfono? En lugar del tercer pedido para llevar esta semana, ¿no podría cocinar un plato yo mismo?
Si generalmente te preocupa el tema "Reducir, reutilizar, reciclar", debes hacerte estas preguntas. La segunda "R" gira en torno a algo que no a muchos de nosotros nos gusta hacer: reducir las cosas. Sin embargo, reducir no significa una renuncia completa, sino crear conciencia de lo que está disponible y si no te llevas bien con ello.
Compra cosas que duren para siempre: compra una vez, guárdalo para siempre
Reutilizar
La camiseta del año pasado ya no te queda bien, ¿o no te gusta tanto? Pero eso no significa que tengas que tirarlo de inmediato. Puede evitar la basura innecesaria teniendo cuidado de dar a las cosas una vida más larga o secundaria.
Así que la tercera "R" se trata de reutilizar. Encuentra maneras de usar los elementos por más tiempo.
En lugar de tirar cosas no deseadas a la basura, busca otro hogar para ellas. Puedes vender, donar o regalar ropa, muebles, tecnología y más si todavía están en buenas condiciones.
Si algo está roto, intente arreglarlo primero. Esto no solo ahorra dinero, sino también recurso
Después de rechazar, reducir y reutilizar viene: reciclar
Reciclar significa hacer algo nuevo a partir de algo viejo, roto, inutilizable (que no se puede reutilizar). Sin embargo, el estado de cosas es aleccionador: en la mayoría de los casos, los procesos de reciclaje no son ciclos, ya que muchos materiales y compuestos plásticos no son reciclables. Más bien, son espirales descendentes, al final de las cuales no hay un producto nuevo equivalente, sino un producto de peor calidad.
Sin embargo, por supuesto, es importante que reciclemos donde podamos. En última instancia, el reciclaje, ya sea que conduzca a productos de menor calidad, igual o superior a la del material de partida, conserva los recursos. Esto se debe a que no es necesario utilizar nuevas materias primas.
Reincorporar
Los residuos orgánicos valen su peso en oro, al menos para tu jardín. Si tú mismo compostas tus desechos orgánicos, obtendrás fertilizante que puede proporcionar nutrientes a tus plantas. Por lo tanto, las pieles de zanahorias, papas y más se almacenan mucho mejor en el compost que en el contenedor de basura orgánica.
El reincorporar, la quinta "R" después de Rechazar, Reducir, Reutilizar, Reciclar, suena complicado; especialmente si no tienes tu propio jardín. Pero también puedes compostar en el balcón e incluso en la cocina.
Conclusión:
Vivir completamente sin desperdicios de un día para otro es casi imposible. Hay un desperdicio aquí y allá que no podemos hacer nada al respecto. Por lo tanto, el movimiento de cero residuos puede sonar intimidante para muchos. Pero como con muchas cosas en términos de sostenibilidad, evitar el desperdicio no se trata de hacer que todo sea perfecto de inmediato. Se trata de hacer cambios en la vida cotidiana que se pueden implementar de manera sostenible.
La "regla de las 5R" ofrece una buena guía para facilitar la reducción de residuos paso a paso. En la vida cotidiana, pregúntate qué "R" de "Rechazar, Reducir, Reutilizar, Reciclar, Reincorporar" podrías implementar actualmente. Por lo tanto, el desperdicio cero se convierte rápidamente en una práctica familiar y no tiene por qué seguir siendo una utopía.
