Con este artículo comienza hoy nuestra primera serie de artículos dedicados a una Navidad sin residuos o zero waste.
¿Por dónde empezamos? ¡Con el calendario de Adviento, claro está!
Es una tradición que, como muchas otras vinculadas a la Navidad, proviene del norte de Europa. El primer calendario de Adviento (de finales del siglo XIX) estaba formado por 24 bolsas, cada una de las cuales contenía una galleta, que marcaba la cuenta atrás para la llegada de la Navidad. Las cosas han evolucionado mucho desde entonces y el calendario de Adviento se ha convertido en una agradable tradición mundial. Inicialmente diseñado para niños, hoy en día existen versiones dedicadas a casi para todos.
Calendarios de Adviento zero waste.
Cuando empezamos a pensar en cómo hacer que el calendario de Adviento fuera zero waste, lo primero que vino a nuestra mente fue que debería ser duradero. Si quieres hacerlo en casa puedes crear bolsas de tela, lana, yute o fieltro, para usar todos los años.
¿Qué poner en el calendario de Adviento? Además de los dulces clásicos (mejor si son caseros o se compran a granel), aquí hay algunos ejemplos para adultos:
- recetas.
- actividades para hacer juntos.
y para los más pequeños:
- canciones infantiles.
- cuentos cortos.
- pinturas.
El calendario de Adviento de ECOnsciencia.
Para nuestro primer año, hemos decidido hacer cosas grandes, dando a nuestros seguidores un calendario especial de Adviento. Todos los días, en la página de inicio habrá una ventana para abrir, con dentro... ¡una sorpresa y promociones en algunos productos!